Cordobesismos (II)


Un cordobesismo interesante se observa en el circuito de la localidad de Colonia Videla, en amarillo en el mapa, donde 27 de los 33 que fueron a votar lo hicieron en blanco, 5 por Aguad y 1 por Delich, caso éste, que da cuenta a nuestro entender de un grado de autonomía individual notable.
Agradecemos a Manuel de http://jazzido.com y a Guille por las pistas para hacernos más eficientemente de los datos del escrutinio. Los circuitos faltantes se deben a ausencia de datos o redistritaje.

Cordobesismos


Entre los cordobesismos más irritantes que tenemos conocimiento se encuentra un sistema de consulta del escrutinio provisorio en Macromedia Flash® que no permite copiar y pegar los resultados en formato alfanumérico y que obliga a ciertos usuarios a echar mano de tecnologías diseñadas básicamente para digitalizar textos publicados antes de la generalización de la informática.

Preguntas frecuentes


Con motivo de las elecciones en Santa Fe del 24 de julio de 2011, varios lectores nos han consultado acerca de discrepancias que encuentran en nuestros resultados respecto a los publicados en los sitios oficiales santafecinos.
Descartado el error humano, las diferencias se deben a que mientras Santa Fe calcula los porcentajes sobre los votos válidos, lo que incluye votos en blanco, en el Atlas Electoral calculamos los porcentajes sobre la base de los votos positivos, es decir, los «votos afirmativos válidamente emitidos» que alude la Constitución nacional al fijar la forma de elección del Poder Ejecutivo, lo que excluye votos en blanco y nulos.
Adoptamos este criterio de las planillas de la Dirección Nacional Electoral, que han sido y son una de nuestras principales fuentes de información.
Siendo que también publicamos el número de votos absolutos, queda al arbitrio del usuario establecer las relaciones de su preferencia.

Distribución normal


Nada muy sorprendente en la distribución del voto por comunas. Norte y Sur votando distinto, el Oeste también existe. Nuevo mapa: cargos por comuna.

Elecciones de gobernadores 1958-1975


Merced al inestimable trabajo de un colaborador, incorporamos al Atlas Electoral los resultados de las elecciones de gobernador y vice en Argentina de 1958, 1960, 1961, 1962, 1963, 1966, 1973 y 1975.
Resta ajustar numerosos detalles, chequear diversas fuentes e ir corrigiendo los pormenores. Como siempre, son bienvenidas las observaciones.

Insólitos desatinos


Leemos en el Clarín de hoy que la diputada radical Elsa Álvarez
ocupa su banca desde diciembre pasado como resultado de una elección inédita en Santa Cruz: la provincia tiene tres representantes en Diputados y los resultados de las elecciones siempre le dieron dos bancas al peronismo y una al radicalismo.
En realidad, la elección de 2009, que ganó el radicalismo, no fue inédita. En 1985 el radicalismo ya había obtenido dos de las tres bancas a renovar. Y le ganó al justicialismo también en 1999. Además, Santa Cruz no tiene tres diputados sino cinco, renovando tres y dos alternativamente cada dos años.
Claro, son detalles que a lo sumo relativizan la singularidad que la cronista busca darle a su relato, pero la falta de precisión en aspectos que son fácilmente verificables difícilmente provee a los lectores certeza sobre los que no lo son.

Caranchos (II)


En relación a nuestra entrada acerca de las preocupaciones del Capitolio por la deuda argentina, leemos que la corresponsal del gran diario argentino opina que
Todavía es un poco temprano para decir qué puede pasar en el nuevo congreso con el proyecto de ley del diputado demócrata Michael McMahon y copatrocinado por otros 30 diputados en su mayoría demócratas de Nueva York para castigar a países “que se niegan a pagar sus deudas”.
Lo que va a pasar con esa iniciativa es que perderá vigencia, será archivada, morirá, como todas cada vez que cambia la composición legislativa en el gran país del norte.
Por otro lado, su patrocinante perdió la elección y en consecuencia no estará en el nuevo Congreso, al igual que otros tres (y hasta cuatro) demócratas neoyorkinos que lo acompañaron con sus firmas.
De modo que para que algo pase será necesario que algún congresista reintroduzca el proyecto -como hizo McMahon con el presentado originalmente por el renunciante Eric Massa-, probablemente esperando mejor suerte que quienes lo precedieron en ese cometido.

Caranchos


«Legisladores de EE.UU. dudan que el país pague» rezaba una nota de Economía en la tribuna de doctrina del jueves pasado.
Esta pieza me llamó la atención no solamente por disonante en medio del luto nacional sino por sus varias inconsistencias.
Algunas de estas son bastante obvias. Por ejemplo, dice que «más de una treintena de representantes… prestaron su firma a iniciativas de castigo financiero (a la Argentina). Sobre un cuerpo legislativo de 435 miembros, eso implica… uno de cada ocho». Hasta donde sé, 30 dividido 435 da 0,07, o sea uno cada catorce. Uno cada ocho equivale a más de cincuenta. Pero bueno.
Sostiene por otro lado que un proyecto del demócrata de Nueva York Michael McMahon tendría el respaldo de 18 demócratas y 15 republicanos, o sea 34 firmas. Sin embargo, THOMAS de la Librería del Congreso registra solamente 31 adherentes incluyendo el autor, 19 demócratas y 12 republicanos. Algo no cuadra. Pero tampoco es grave.
La propuesta de McMahon, ingresada el 22 de junio de 2010 -el día que cerró el más reciente canje de deuda argentina- en realidad es la misma que presentó un año antes el también demócrata neoyorkino Eric Massa, quien renunciara en marzo envuelto en un escándalo por acoso sexual.
Impulsada por el cabildeo de los llamados «fondos buitres», esta iniciativa apunta a responsabilizar a los «Estados evasores de sentencias judiciales», una categoría legal inspirada por la Nación Argentina, y sostiene en su considerando 5 que «Argentina tiene la capacidad para pagar a sus acreedores externos», algo que ciertamente contrasta con las «dudas» que según la corresponsal de LA NACION existirían entre los miembros del Capitolio acerca de la economía del país.
Tampoco resulta claro que quienes promueven esta legislación «militan en las filas del presidente norteamericano, Barack Obama» como parece sugerir la noticia, visto que tanto Massa como McMahon se opusieron tenazmente a las reformas al sistema de salud impulsadas por la Casa Blanca.
Finalmente,
«Esto no tiene nada que ver con la ideología o con simpatías políticas, sino con el reclamo de los electores», dijo a LA NACION un asesor demócrata del Congreso.
Esto sí es más difícil ponerlo en duda, considerando que en las elecciones de ayer los demócratas perdieron, entre otros, el escaño de McMahon, el que dejó Massa y los de seis cofirmantes del proyecto, tres de éstos también neoyorkinos. Así es la democracia en América.

Comentarios recientes